¡Bienvenida!
Soy Carolina, la creadora de Rutas Veganas, y si estás aquí, probablemente entiendas lo difícil que puede ser encontrar un buen sitio donde comer sin renunciar a tus valores.
Pero déjame contarte algo: hace más de 20 años, esto era una auténtica odisea.
Desde niña me gustaban los animales y, al crecer, me pregunté cómo habían llegado a mi plato.
Me prometí a mí misma averiguarlo algún día.
Cuando salí de casa de mis padres, pensé que había llegado el momento de dar el paso, y ahí es cuando me topé con todo tipo de dificultades: falta de opciones 100% vegetales y mucha incomprensión.
FOTO: Con Mayte de Planeta Vegano. La Caja Muda
No conocía a nadie que compartiera mi forma de ver la vida, ni existían guías ni redes sociales donde investigar.
Así que me suscribí por correo ordinario a una newsletter de PETA (Personas por un Trato Ético a los Animales), que me enviaba información sobre granjas y mataderos. Mis primeras impresiones seguro que coinciden con las tuyas: pensaba que no podía ser real, que eran imágenes manipuladas o casos aislados.
Pero hoy tengo claro que me equivocaba.
Adopté a mi primer perro, y él me ayudó a hacer el último clic.
Se llamaba Tute ❤️ y lo llevo muy dentro de mí. Recuerdo mirarlo y pensar que no era tan diferente de un cerdo o una vaca, y que todos merecían el mismo respeto.
Me convertí en la única persona en mi familia y mi grupo de amigos que rechazaba el consumo de animales y, también, la única sin opciones en Navidad. Esa persona que iba a restaurantes y solo podía pedir ensalada de lechuga y tomate, y la que continuamente tenía que dar explicaciones de su elección.
Sentí lo que es ser diferente, pero siempre recordaba cuál era la verdadera causa. Los animales estaban en una situación mucho peor que la mía, y eso me daba la fuerza para seguir adelante.
Después apareció en mi vida el grupo Equanimal, que fue todo un descubrimiento. Por fin conocía a gente que estaba pasando por lo mismo y podía hacer amigos con quienes compartir y crecer.
Hacíamos activismo y salíamos a comer; conocí a personas maravillosas, y aquello fue decisivo para asentar las bases de mi estilo de vida actual.
Quería disfrutar comiendo, como lo hacía el resto de la gente. Pero, sobre todo, quería que otras personas no tuvieran que pasar por lo mismo.
Así que empecé a investigar, a recorrer Madrid en busca de esos pequeños rincones donde un plato 100% vegetal no fuera una rareza.
Me convertí en la amiga a la que todos preguntaban: “¿Dónde podemos ir a comer hoy?”. Y después de años de buscar, probar y compartir, me di cuenta de que mi experiencia podía ayudar a muchas más personas.
Así nació Rutas Veganas. Un espacio donde no hace falta preguntarse qué pedir porque ya lo he investigado por ti. Donde no sientes que estás solo o sola en este camino, porque aquí somos una comunidad. Donde cada lugar recomendado es un pequeño triunfo para quienes llevamos años luchando por una gastronomía más inclusiva.
Lo que antes parecía imposible, hoy es una realidad. Rutas Veganas es la web que me hubiera gustado tener cuando empecé y, si te sirve a ti, entonces todo este camino ha valido la pena❤️
Aquí siempre hay un sitio en la mesa para ti.
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